miércoles, 21 de agosto de 2013

Marina


Parte del grupo de amigos con quien comparto alegrías y lluvias trabajan para Aresa Internacional. Construyen barcos. Les han vendido unos cuantos ejemplares a la Marina Camerunesa, para la lucha antipiratería. Unos fieras.


Bellezones de 900 caballos, todos fuerabordas excepto un intraborda, estos barcos cogen más de 50 nudos de velocidad, y el último puede frenarse en seco en lo que se llama crash stop.



Llegamos al cuartel, banderas por todos lados, todo el mundo uniformado, una mitad terrestre, la otra marina. Los barcos tienen preparado un soporte para colocar las metralletas, pero las han quitado para que hiciéramos nuestro paseo tranquilos, huy,..



Nos equiparon con unos monos impermeables y unos chalecos salvavidas, y salimos del puerto. Venía con nosotros el jefe de seguridad de una empresa que trabaja con la mía, una forma como otra cualquiera de mejorar relaciones. Encima el tío es majo. Y mi jornada laboral consumiendo minutos.



Nos llevaron a toda velocidad, y aunque la desembocadura del Wouri en el mar estaba tranquila, pegábamos unos saltos que nos separaban de los asientos. Éstos tenían a los pies una especie de bridas para hacer fuerza en sentido contrario y no salir disparados.



La verdad que aquí no hay parques de atracciones, pero si te lo montas bien,.. Rematamos con unas cervecitas en la cantina, así da gusto ir al trabajo.